Caso real de un cliente
Hoy toca en el blog contar un caso real de un cliente.
Este cliente nos compra en octubre de 2015 portátil Asus X555LD-XX138 con estas características:
- Procesador: Intel Core i7-4510U (2×2,0 GHz / 4 MB caché).
- Pantalla / Resolución: 15,6″ brillante / 1366×768 píxeles.
- Memoria RAM: 4 GB RAM DDR3
- Disco Duro HDD: 500 GB (5400 RPM).
- Tarjeta gráfica: nVidia GT 820M con 2 GB DDR3 (dedicada).
- Dimensiones / Peso: 382x256x25,8 mm / 2,3 kg.
- Otras especificaciones: Windows 8.1, batería de 2 celdas, salida HDMI, 2xUSB 3.0, 1xUSB 2.0, Wifi b/g/n, Bluetooth 4.0, grabador DVD-DL, Webcam VGA, lector de tarjetas SD.
Nos dice que tarda mucho en arrancar y en general que va lento.
Vemos que tiene disco duro mecánico y 4Gb de RAM, Windows 10 con las sucesivas actualizaciones recomendamos que tenga 8Gb de RAM para que vaya el sistema fluido. Le recomendamos el cliente ampliación de memoria RAM a 8Gb y montar disco SSD.
El cliente nos acepta el presupuesto, le montamos el disco SSD y le ampliamos la memoria RAM y el rendimiento del portátil no tiene punto de comparación. Tarda en arrancar menos de 4 segundos y trabaja con varias aplicaciones a la vez sin problemas.

P.D.
Hoy en día lo primero que miramos cuando un cliente nos dice que el equipo le va lento es si tiene disco duro mecánico o SSD, el rendimiento de un SSD respecto a un disco duro mecánico es muy superior. Gracias a esta tecnología equipos con unos cuantos años a sus espaldas conseguimos que tengan un rendimiento optimo.
Comentarios recientes